Creo que fue poco después de Navidad cuando dimos en filosofía una clase sobre si los animales piensan. En ella finalmente se dejó claro que no pensaban con argumentos, es decir, que los animales sólo se guían por instintos, por impulsos que les indican qué hacer en cada momento para sobrevivir. También dijimos que siguen hábitos y otros tantos argumentos.
Sin embargo, existe un contrargumento que la verdad es que no me acuerdo si lo dijimos en clase. En este vídeo (lo importante es a partir del minuto 03:16) se puede ver un comportamiento de un delfín y de un perro que se aleja de aquello de que los animales sólo se guían por instintos.
En el vídeo se ve cómo un perro se cae de un barco y cae al mar, en el que hay varios tiburones. El perro se va acercando a la orilla pero los tiburones lo ven y se lanzan a atacarle pero en el último minuto un delfín ataca con el morro al tiburón, que finalmente huye. Esto no es lo más lógico si el delfín sólo se guiara por instinto porque no es lo más lógico enfrentarte a un tiburón que puede matarte por un perro, al que no te vas a comer ni te va a dar beneficio alguno.
Como estos, hay muchos casos en la actualidad. Siempre hemos oído casos de animales que salvan a sus dueños de una muerte incluso. Este comportamiento se ve mejor en dos especies: los perros y los delfines. Hay casos de perros que han salvado a sus amos de incendios o a niños pequeños y luego los casos de los delfines que ayudaron a soldados americanos en la II guerra mundial, en el Pacífico.
Emilio L.
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